Aunque existen muchos tarots, el de Marsella, restaurado por Philippe Camoin y Alejandro Jodorowsky, y descubierto por ellos mismos en un viejo anticuario de México, tras un extraordinario periplo, es el ejemplar más antiguo hallado hasta la fecha. Además, este tarot, conserva los colores originales y presenta elementos que podrían haberse perdido o desdibujado con el paso del tiempo. Los estudios realizados por Arturo, se han focalizado siempre sobre esta baraja.
El Tarot de Marsella Restaurado, durante años ha formado parte de la vida cotidiana de Arturo Fuente. Sus trabajos e investigaciones, han estado siempre ligados a este atractivo ejemplar. Para Arturo, el tarot ha sido algo más que una simple baraja de cartas; ha sido una herramienta de autoconocimiento e introspección, y parte importante en el escenario más lúdico y social de su vida. Sus juegos, de cosecha propia, han logrado seducir y cautivar a familiares, amigos, y desconocidos.